Vigésimo Primer Domingo del Tiempo Ordinario: Primera Lectura
Isaías 66, 18-21
Esto dice el Señor:
“Yo vendré para reunir a las naciones de toda lengua.
Vendrán y verán mi gloria.
Pondré en medio de ellos un signo,
y enviaré como mensajeros a algunos de los supervivientes
hasta los países más lejanos y las islas más remotas,
que no han oído hablar de mí ni han visto mi gloria,
y ellos darán a conocer mi nombre a las naciones.
Así como los hijos de Israel
traen ofrendas al templo del Señor en vasijas limpias,
así también mis mensajeros traerán,
de todos los países, como ofrenda al Señor,
a los hermanos de ustedes a caballo, en carro, en literas,
en mulos y camellos, hasta mi monte santo de Jerusalén.
De entre ellos escogeré sacerdotes y levitas”.