Vigésimo Tercer Domingo del Tiempo Ordinario: Antífona de la Comunión 1
Salmo 41, 2.3
Como la cierva busca el agua de las fuentes,
así, sedienta, mi alma te busca a ti, Dios mío.
Mi alma tiene sed del Dios vivo.
(Salmo 41, 2.3)
Verse 1:
Espera en Dios, que volverás a alabarlo:
«Salud de mi rostro, Dios mío».
(Salmo 41, 6)
Verse 2:
Una sima grita a otra sima
con voz de cascadas:
tus torrentes y tus olas
me han arrollado.
(Salmo 41, 8)
Verse 3:
De día el Señor me hará misericordia,
de noche cantaré la alabanza,
la oración al Dios de mi vida.
(Salmo 41, 9)
Verse 4:
Envía tu luz y tu verdad:
que ellas me guíen.
(Salmo 42, 3)
Verse 5:
Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
(Gloria Patri)