Vigésimo Quinto Domingo del Tiempo Ordinario: Salmo Responsorial
Salmo 112, 1-2. 4-6. 7-8
Alaben al Señor, que ensalza al pobre.
O bien:
Aleluya.
Verse 1:
Alaben, siervos del Señor,
alaben el nombre del Señor.
Bendito sea el nombre del Señor,
ahora y por siempre.
Verse 2:
El Señor se eleva sobre todos los pueblos,
su gloria sobre el cielo:
¿quién como el Señor Dios nuestro,
que se eleva en su trono
y se abaja para mirar
al cielo y a la tierra?
Verse 3:
Levanta del polvo al desvalido,
alza de la basura al pobre,
para sentarlo con los príncipes,
los príncipes de su pueblo.