Trigésimo Primer Día del Tiempo Ordinario C: Segunda Lectura
2 Tesalonicenses 1, 11 - 2, 2
Hermanos:
Oramos siempre por ustedes,
para que Dios los haga dignos de la vocación a la que los ha llamado,
y con su poder,
lleve a efecto tanto los buenos propósitos que ustedes han formado,
como lo que ya han emprendido por la fe.
Así glorificarán a nuestro Señor Jesús y él los glorificará a ustedes,
en la medida en que actúe en ustedes la gracia de nuestro Dios y de Jesucristo, el Señor.
Por lo que toca a la venida de nuestro Señor Jesucristo
y a nuestro encuentro con él,
les rogamos que no se dejen perturbar tan fácilmente.
No se alarmen ni por supuestas revelaciones,
ni por palabras o cartas atribuidas a nosotros,
que los induzcan a pensar que el día del Señor es inminente.