Tercer Domingo de Pascua: Segunda Lectura

Apocalipsis 5, 11-14

Yo, Juan, tuve una visión,
en la cual oí alrededor del trono de los vivientes y los ancianos,
la voz de millones y millones de ángeles,
que cantaban con voz potente:
“Digno es el Cordero, que fue inmolado,
de recibir el poder y la riqueza, la sabiduría y la fuerza,
el honor, la gloria y la alabanza”.
Oí a todas las criaturas que hay en el cielo, en la tierra,
debajo de la tierra y en el mar
-todo cuanto existe-, que decían:
“Al que está sentado en el trono y al Cordero,
la alabanza, el honor, la gloria y el poder,
por los siglos de los siglos”.
Y los cuatro vivientes respondían: “Amén”.
Los veinticuatro ancianos se postraron en tierra
y adoraron al que vive por los siglos de los siglos.