Cuarto Domingo de Adviento: Antífona de la Entrada
Isaías 45, 8
Cielos, destilen el rocío; Nubes, lluevan la salvación;
que la tierra se abra, y germine el Salvador.
(Isaías 45, 8)
Verse 1:
El cielo proclama la gloria de Dios,
el firmamento pregona la obra de sus manos.
(Salmo 18, 2)
Verse 2:
El día al día le pasa el mensaje,
la noche a la noche se lo susurra.
(Salmo 18, 3)
Verse 3:
Allí le ha puesto su tienda al sol:
él sale como el esposo de su alcoba.
(Salmo 18, 6)
Verse 4:
Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
(Gloria Patri)