Cuarto Domingo de Tiempo Ordinario: Antífona de la Entrada
Salmo 105, 47
Sálvanos, Señor y Dios nuestro;
reúnenos de entre las naciones,
para que podamos agradecer tu poder santo
y nuestra gloria sea alabarte.
(Salmo 105, 47)
Verse 1:
Dichosos los que respetan el derecho
y practican siempre la justicia.
(Salmo 105, 3)
Verse 2:
Acuérdate de mí por amor a tu pueblo,
visítame con tu salvación.
(Salmo 105, 4)
Verse 3:
Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
desde siempre y por siempre.
Y todo el pueblo diga:
¡Amén! ¡Aleluya!
(Salmo 105, 48)
Verse 4:
Gloria al Padre y al Hijo
y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. Amén.
(Gloria Patri)