El Decimoquinto Domingo del Tiempo Ordinario, Año B: Aclamación antes del Evangelio
Efesios 1, 17-18
El Padre de nuestro Señor Jesucristo ilumine
los ojos de nuestro corazón,
para que comprendamos cuál es la esperanza a la que nos llama.
El Padre de nuestro Señor Jesucristo ilumine
los ojos de nuestro corazón,
para que comprendamos cuál es la esperanza a la que nos llama.