El Decimonoveno Domingo del Tiempo Ordinario, Año C: Primera Lectura
Sabiduría 18, 6-9
La noche de la liberación pascual
fue anunciada con anterioridad a nuestros padres,
para que se confortaran al reconocer la firmeza
de las promesas en que habían creído.
Tu pueblo esperaba a la vez la salvación de los justos
y el exterminio de sus enemigos.
En efecto, con aquello mismo con que castigaste a nuestros adversarios
nos cubriste de gloria a tus elegidos.
Por eso, los piadosos hijos de un pueblo
justo celebraron la Pascua en sus casas,
y de común acuerdo se impusieron esta ley sagrada,
de que todos los santos participaran por igual de los bienes
y de los peligros.
Y ya desde entonces cantaron los himnos de nuestros padres.