El Trigésimo Segundo Domingo del Tiempo Ordinario, Año B: Salmo Responsorial
Salmo 145, 7. 8-9a. 9bc-10
Alaba, alma mía, al Señor.
O bien:
Aleluya.
Verse 1:
Que mantiene su fidelidad perpetuamente,
que hace justicia a los oprimidos,
que da pan a los hambrientos.
El Señor liberta a los cautivos.
Verse 2:
El Señor abre los ojos al ciego,
el Señor endereza a los que ya se doblan,
el Señor ama a los justos,
el Señor guarda a los peregrinos.
Verse 3:
El Señor sustenta al huérfano y a la viuda
y trastorna el camino de los malvados.
El Señor reina eternamente,
tu Dios, Sión, de edad en edad.