El Cuarto Domingo de Cuaresma, Año B: Salmo Responsorial
Salmo 136, 1-2. 3. 4-5. 6
Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti.
Verse 1:
Junto a los canales de Babilonia
nos sentamos a llorar con nostalgia de Sión;
en los sauces de sus orillas
colgábamos nuestras cítaras.
Verse 2:
Allí los que nos deportaron
nos invitaban a cantar,
nuestros opresores, a divertirlos:
Cántennos un cantar de Sión.
Verse 3:
¡Cómo cantar un cántico del Señor
en tierra extranjera!
Si me olvido de ti, Jerusalén,
que se me paralice la mano derecha.
Verse 4:
Que se me pegue la lengua al paladar
si no me acuerdo de ti,
si no pongo a Jerusalén
en la cumbre de mis alegrías.